Seminario abordó la transformación de residuos orgánicos en recursos
Con el objetivo de compartir experiencias en la reducción de los residuos enviados a disposición final mediante la prevención, reutilización, reciclaje y valorización de estos, con foco en la gestión sostenible de los residuos orgánicos, para promover su transformación en nuevos productos o fuentes de energía y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a su descomposición, el Consejo Consultivo Regional del Medio Ambiente -en el cual participa la Unidad de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Universidad de Valparaíso (UMAS UV) a través de su coordinadora, Yenny Olivares- realizó el seminario “Transformando residuos orgánicos en recursos: estrategias y buenas prácticas”.
El encuentro tuvo lugar en el auditorio de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas UV (campus Las Heras) y contó con una nutrida concurrencia.
Luego del saludo de Fernando Kursan, presidente del Consejo Consultivo Regional del Medio Ambiente, y de José Luis Meza, director de Relaciones Institucionales de la Universidad de Valparaíso, Yenny Olivares entregó el contexto de la actividad, explicando que “esta jornada se enmarca en las acciones de sensibilización y acceso a la información que el Consejo Consultivo Regional realiza en su plan 2025. ¿Pero qué son los CCRMMA? Son mecanismos de participación ciudadana que se fundan en el derecho que el Estado reconoce a las personas a participar en las políticas, planes, programas y acciones gubernamentales. Dichos consejos se crearon a partir de la Ley 19.300 sobre Bases Generales del Medio Ambiente y buscan profundizar y fortalecer la relación entre la sociedad civil organizada y el Ministerio del Medio Ambiente. Su fin es debatir y opinar sobre temas que sean de relevancia ambiental, principalmente sobre los instrumentos o materias que sean puestas a su consideración, para fortalecer su calidad técnica, dejando constancia de las distintas visiones existentes sobre un determinado tema”.
Luego comentó que “la temática central de este seminario se sustenta en que la situación regional al respecto de los residuos es crítica, debido a que su principal relleno sanitario proyecta su vida útil sólo hasta 2028, con un volumen de procesamiento que supera su capacidad autorizada. El 2024 se procesaron el equivalente a 546.165 toneladas, superando el rango de operación autorizado a lo que se sumó la recepción de noventa mil toneladas anuales de residuos industriales, generando un escenario crítico para la disposición final de residuos en las principales comunas de la Región. Este relleno sanitario hoy en día es utilizado por diez comunas -Viña del Mar, Valparaíso, Concón, Casablanca, Algarrobo, El Tabo, Cartagena, El Quisco, San Antonio y Santo Domingo-, por lo que es aquí donde se concentra el 51,56 por ciento de los residuos sólidos domiciliarios generados en la Región. El escenario descrito anteriormente implica, entonces, entre otras alternativas, fomentar la valorización, establecer desviación de flujos de residuos e incentivar el compostaje”.
A continuación, se desarrolló el primer bloque de presentaciones, que incluyó “Gestión de residuos orgánicos y Estrategia Nacional para Prevenir y Reducir las Pérdidas y el Desperdicio de Alimentos”, cargo de Christian Fuentes, profesional de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente; “Residuos orgánicos: tecnologías para su valorización”, por Ociel Cofré, jefe de carrera de Ingeniería Civil Ambiental de la UV; y “Biodigestión en la gestión de residuos orgánicos”, por Álex Galleguillos, seremi del Medio Ambiente de Valparaíso.
Tras una ronda preguntas, se dio paso al segundo bloque, que contempló las presentaciones “Programa de recolección de orgánicos y generación de compost a nivel comunitario”, a cargo de Alejandro Vives, director ambiental de la Municipalidad de Villa Alemana; “Gestión de residuos orgánicos in situ en el Hospital Carlos van Buren: desafíos, experiencias y resultados”, por Felipe Varas, de la Fundación Red Bokashi, y Alejandra Briones, jefa de la Unidad de Gestión Ambiental de dicho centro asistencial; y “Compostaje en Casablanca”, con Julio Hernández, de Bonum Terrae SpA. El bloque se cerró con una nueva ronda de preguntas.
“Tenemos que pasar del diagnóstico y avanzar”
Una vez finalizado el seminario, el seremi Álex Galleguillos comentó que “yo creo que sobre todo el tema de los residuos, en particular los residuos orgánicos, tienen mucha relevancia, porque tienen una serie de dimensiones. Tienen la componente social, tienen la componente medioambiental, pero lo más importante es que -y agradecemos a la Universidad de Valparaíso que nos da este espacio- la academia, la empresa privada, el Estado a través de sus representantes de las distintas reparticiones, todos somos importantes y aquí hay que hacernos responsables todos, no solamente de la contaminación de las empresas, recordar que también nosotros, el ser humano, contamina desde que se levanta y también nos tenemos que hacer cargo de los residuos. Y aquí es importante, sobre todo en los periodos de elecciones, que la gente vote informada de si a quien va a elegir está o no en las prerrogativas que nosotros estamos buscando, prerrogativas de la preservación de los ecosistemas, pero también haciéndonos cargo de los residuos”.
Respecto a la biodigestión, manifestó que “tenemos que pasar del mediano plazo, yo creo que tenemos que hacer lo más prontamente posible este tipo de proyectos que impliquen nuevas tecnologías. Hoy día tenemos normativas que han avanzado mucho en este sentido, el mercado también es muy dinámico, sobre todo con las energías renovables no convencionales, y hay que recordar que la biodigestión anaeróbica genera una energía que se llama con alto factor de planta, es decir, con disponibilidad sobre el noventa por ciento, lo cual la hace muy atractiva. Entonces, tenemos que pasar del diagnóstico y tenemos que avanzar. Hoy día hay varias municipalidades de la Región que están analizando esta problemática y están viendo y estudiando las mejores tecnologías para implementar. Nosotros como ministerio queremos acelerar los plazos, creemos que las municipalidades, sobre todo al implementar esta tecnología, tendrán una disminución en los costos operacionales, en los costos de tratamiento y en la gestión integral”.
Ociel Cofré, en tanto, dijo que “la idea es que nosotros desde la universidad podamos aportar en la generación de nuevos conocimientos y también en la innovación. A veces, efectivamente, no es que tengamos que inventar algo, pero tampoco es llegar y copiar algo que se hace afuera y que resultó bien, copiarlo acá idénticamente y que vaya a resultar bien. Entonces, la innovación nos ayuda a buscar o a darle un giro a veces a algunos conocimientos y también a aterrizar esto. Y eso da oportunidades de trabajo, abre redes nuevas y se puede crear un ecosistema en torno a todo lo que es un residuo y, finalmente, es lo que tributa al concepto de economía circular. La idea es que nosotros podamos vincularnos. O sea, nosotros como Universidad ya no podemos pensar como antiguamente, que estábamos encerrados y éramos una suerte de templo del conocimiento aislado de la sociedad. Nosotros tenemos que vincularnos con la sociedad, salir, y no que la sociedad nos venga a buscar a nosotros. Tenemos que salir, vincularnos con la empresa, vincularnos con la gente, difundir y generar oportunidades de empleo también y, básicamente, mejorar la vida de las personas. Para eso estamos”.